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Dentro de los bulos sobre las mujeres, las narrativas desinformadoras que atacan a las mujeres trans han ganado presencia en las redes, especialmente en los últimos años con los derechos de este colectivo en el centro del debate. La atribución errónea de la autoría de tiroteos o la afirmación de que las mujeres trans “son hombres” son algunas de las desinformaciones que buscan reforzar el estigma y los prejuicios contra el colectivo. Los delitos de odio hacia personas por su orientación sexual e identidad de género aumentaron en un 68,23% de 2020 a 2021. Esta tendencia se mantiene en 2022, según los informes del Ministerio del Interior. Consultamos con expertas qué finalidad persiguen y qué consecuencias tienen para las personas trans.
Entre las narrativas desinformadoras sobre las mujeres transgénero, destacan aquellas que aseguran que las mujeres de los presidentes de algunos países “son hombres”, otras que afirman que deportistas se identifican como mujeres trans para poder participar en las competiciones deportivas femeninas y alcanzar mejores puestos o la narrativa que atribuye la autoría de tiroteos masivos a personas trans.
Varias expertas consultadas por Maldita.es coinciden en que, aunque son narrativas que persiguen objetivos distintos, tienen un elemento común: reforzar el estigma, perpetuar los prejuicios contra las personas trans y vincular a este colectivo a “lo negativo y lo problemático”.
La desinformación que dice que deportistas se identifican como mujeres trans para tener supuestas ventajas deportivas
Una de las desinformaciones centradas en las mujeres trans que en Maldita.es hemos identificado a lo largo de los años es la que asegura que deportistas se identifican como mujeres trans para poder participar en competiciones femeninas y obtener supuestas ventajas deportivas. Por ejemplo, en 2023, se difundió un vídeo en el que aparece la luchadora de artes marciales mixtas, Gabi García, derrotando a otras mujeres. Se compartía con mensajes referentes a García como “un tío que se declara mujer”. Sin embargo, Gabi García no es una mujer trans, pero se usa esta desinformación para atacarla a ella y al colectivo.
Captura de una desinformación que aseguraba que una luchadora es “un tío que se declara mujer”. Las expertas consultadas por Maldita.es coinciden en que esta narrativa surge de una cuestión biológica basada en el planteamiento de que “los hombres tienen pene y las mujeres tienen vulva”. Por otro lado, existe la cuestión social que asigna a las etiquetas de ‘hombre’ o de ‘mujer’ una serie de estereotipos y comportamientos, explican las expertas.
“¿Qué ocurre cuando las personas no encajan en estas categorías o no son ni actúan como se espera que lo hagan?”, se pregunta Anaïs Madera Roldán, antropóloga social y maldita que nos ha prestado sus superpoderes. La persona pasa a ser cuestionada, discriminada y se la excluye socialmente “porque no es quien se espera que sea”, manifiesta. Partiendo de esta premisa, esta desinformación pretende cuestionar e invalidar el género de las mujeres trans.
La narrativa que asegura que las mujeres de algunos presidentes son trans
Otra de las afirmaciones difundidas en las redes sociales es la que dice que las esposas de algunos presidentes o primeros ministros de diferentes gobiernos son trans. Michelle Obama, Brigitte Macron o Begoña Gómez han sido víctimas de estas desinformaciones que tienden a ganar presencia durante campañas presidenciales o fechas próximas a ellas, como sucedió con la primera dama de Francia. En el caso español, empezó a difundirse una comparación de supuestas imágenes de la mujer del presidente Pedro Sánchez, Begoña Gómez, como si una fuese actual y la otra antigua.
Captura de una de las imágenes que se hizo viral. La finalidad de esta narrativa persigue desacreditar y ridiculizar tanto a las mujeres que señalan como a la imagen de los políticos, aseguran las expertas. Uge Sangil, presidenta de la Federación Estatal LGTBI+, explica a Maldita.es que la intención de esta desinformación es “atacar a terceras personas” al presentar a la persona trans como “algo vergonzante, humillante” y como si ser trans fuese algo que hay que ocultar.
Natalia Martín Domínguez, psicóloga, experta en el colectivo LGTBI y maldita con Superpoderes, aclara que lo que se espera de la clase política es un ejemplo de “valores y tradiciones de la sociedad que representan” y que un mandatario tenga una relación amorosa con una mujer trans, como intentan de hacer creer estos bulos, se considera que “no cumple con esa ejemplaridad”.
La desinformación que atribuye la autoría de tiroteos a personas trans
La tercera narrativa desinformadora que hemos identificado en Maldita.es estos años es la que atribuye la autoría de varios tiroteos a personas trans. Así lo vimos con el tiroteo en un desfile por el Día de la Independencia de Estados Unidos y con el atacante en una escuela de Texas (Estados Unidos) en 2022. En este último caso, empezaron a compartirse fotografías de personas ajenas a lo ocurrido asegurando que eran quienes habían disparado en la escuela de Texas. En una de ellas, aparecía una persona sujetando la bandera trans.
Publicaciones que se difundieron con una imagen de una persona con la bandera trans asegurando que era el atacante de Texas. Las expertas coinciden en que su finalidad es asociar al colectivo con la violencia, “demostrar” que son personas peligrosas que suponen un riesgo y una amenaza para la sociedad. Rosa María García, investigadore trans, ha explicado a Maldita.es que su interés reside en imponer en las personas trans una “vigilancia social muy dura bajo el estigma de la neurodivergencia en general y del autismo en particular”, es decir, relacionar los actos violentos con la “locura”.
La desinformación contra las mujeres transgénero aumentó con el debate de la Ley Trans
Un análisis de mayo 2023 del Observatorio Europeo de Medios Digitales (EDMO, por sus siglas en inglés) identifica estas narrativas desinformadoras dentro de las cinco principales que más se difunden en la Unión Europea. Además, explica que muchas de estas “historias falsas” parecen surgir a partir de temas de actualidad, como sería con la aprobación de legislaciones en ciertos países.
Anaïs Madera afirma que estos discursos de odio se han extendido en momentos en los que aparecen en el debate público “cuestiones relacionadas con la identidad de género y los derechos de las personas trans, como serían los debates generados por la polémica Ley Trans”, aprobada en España en febrero de 2023.
El informe sobre la evolución de los delitos de odio en España de 2021 del Ministerio del Interior refleja que los delitos de odio hacia personas por su orientación sexual e identidad de género aumentaron en un 68,23% de 2020 a 2021, tendencia que se ha mantenido durante 2022. Uge Sangil defiende que la cifra real es mayor porque “solo se denuncian dos de cada 10 delitos de odio y solo uno de cada 30 delitos de odio denunciados por las personas del colectivo se considera incidente de odio y se registra como tal”.
Qué consecuencias tiene para el colectivo trans
Estar expuesto a la propagación sin control de la desinformación sobre el colectivo trans, tanto en las redes sociales como en los medios, tiene consecuencias emocionales, de salud mental, económicas, laborales, de discriminación, incluso, de intentos autolíticos (autolesiones) para las personas transgénero, como asegura Uge Sangil.
La sociedad se convierte en un entorno hostil para las personas trans a las que invade una sensación permanente de inseguridad en un mundo que las ve como una amenaza, explican las expertas. Natalia Martín, experta en el colectivo LGTBI y maldita, asegura que “el miedo se sustenta en un peligro real de que sean agredidas física o verbalmente, además de sufrir otro tipo de discriminaciones”.
El informe ‘Personas Trans y Educación No Formal’ de 2021 de la Federación Estatal LGTBI+ estableció que el 61,11% de las personas encuestadas tuvieron ideas suicidas y los intentos de suicidio alcanzaron el 16,67%, ambos casos relacionados con el aumento de rechazo hacia su identidad de género.
“El odio y el estigma dañan a las personas. Y ya está bien”, sentencia Sangil.
En este artículo han colaborado con sus superpoderes las malditas Anaïs Madera Roldán, antropóloga social y Natalia Martín Domínguez, psicóloga, experta en el colectivo LGTBI y en igualdad de género.
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