La ciencia ha traído buenas y malas noticias este 2022. Pero, sobre todo, un puñado de hitos científicos cuyo alcance está por verse. La revista Science dedicó su último número a recoger algunos avances que considera claves en este año que se cierra, tras el paréntesis pandémico, en que la carrera por la vacuna contra la covid copó todo el interés.
Desde Science, cuenta Tom Appen en Sinc que “elegimos las noticias más importantes de la ciencia del último año, con la vista puesta en su impacto en la investigación y en la sociedad, y también en la ciencia del futuro”. Y en su top 10 no ha llegado a entrar –por tiempo– el anuncio de la ganancia de energía neta con fusión nuclear. Pero en la revista tienen claro que nada se puede comparar a lo conseguido con el lanzamiento del telescopio James Webb, justo hace ahora un año.
En Newtral.es también recogemos algunas de las que nuestras personas expertas de referencia en distintos campos creen que han saltado a la actualidad pero, sobre todo, marcarán nuestro futuro. Aquí va nuestro top 13 + 1
1. James Webb, la máquina del tiempo de los cielos
10.000 millones de dólares. Una travesía de 1,5 millones de kilómetros al espacio. Y varias imágenes que son ya verdaderos iconos de la exploración espacial. El nuevo telescopio espacial James Webb (JWST, de la NASA, la ESA y la agencia espacial canadiense) abrió por fin su hexagonal ojo dorado tras años de retraso. Un hito para la ciencia pero, sobre todo, para la ingeniería.
A diferencia de su predecesor, el Hubble, el JWST puede captar la luz infrarroja, incluida la emitida por las primeras estrellas y galaxias que comenzaron a existir. A los pocos días de entrar en funcionamiento a finales de junio de 2022, los investigadores empezaron a descubrir miles de nuevas galaxias, más distantes y antiguas que cualquiera de las documentadas hasta entonces. Y nos ofreció nuevas versiones de icónicas estampas del Hubble, con mucha más definición y detalle.
2. La bacteria más grande del mundo
El descubrimiento de la bacteria más grande del mundo, con sus complejas estructuras internas, ha supuesto un hito científico para la biología este año. Se suponía que los microbios son microscópicos, pero Thiomargarita magnifica puede ser 5.000 veces más grande que muchas células. Alcanza fácilmente el centímetro de longitud. Se puede observar como un hilillo a simple vista.
La bacteria más grande del mundo comparada con una moneda de 10 centavos | T. TYMLSe descubrió por primera vez en hojas en descomposición en un manglar de la isla caribeña de Guadalupe, en las Antillas francesas. Lo habitual en una célula bacteriana es que su ADN flote libremente en el citoplasma, pero en T. magnifica está en compartimentos como ‘pepitas’ unidos a la membrana, una innovación característica de células más complejas.
3. ADN de debajo de las piedras
En 2021 se recuperó, por primera vez, ADN de neandertales en la tierra que pisaban nuestros ancestros de Atapuerca. Restos genéticos que se quedaron entre el barro y la tierra sepultados durante más de 100.000 años.
Gracias a eso y a técnicas bioinformáticas avanzadas –que sacan mucho de apenas fragmentos hallados en restos fósiles–, podemos hacernos una idea de cómo eran sus vidas. Y de hasta cómo era la primera familia neandertal. Una de las responsables de este hallazgo, Janet Kelso, nos lo contaba en Newtral.es, en su visita a España.
La revista Science ha destacado como uno de los hitos de la ciencia de 2022 que hayan recuperado ADN de hace 2 millones de años en el permafrost de la zona ártica. Revelando un paisaje verde y lleno de vida en el actual desierto blanco de Groenlandia.
4. Las vacunas contra el VRS, más cerca
Para quien haya tenido o cuidado un bebé las siglas VRS no eran una novedad. Pero este 2022 se han convertido en tema de conversación general, después de que el virus resiratorio sincitial (VRS) haya colapsado las urgencias de buena parte del hemisferio norte, tras dos años con muy pocos casos.
Es la causa más frecuente de bronquiolitis y neumonía en lactantes. Ahora, los ensayos clínicos a gran escala de dos vacunas contra el VRS han demostrado por fin que pueden proteger con seguridad a los bebés y los ancianos de la enfermedad grave.
En paralelo, se han dado los primeros pasos para una vacuna universal contra la gripe, que ha dado resultados muy prometedores en animales de laboratorio.
5. DART, misión asteroide completada
No lo hemos hecho como en Armageddon (afortunadamente), pero la humanidad ha conseguido desviar un asteroide. Eso sí, una roca que no nos amenazaba. La sonda Double Asteroid Redirection Test (DART), del tamaño de un frigorífico, se estrelló a unos 6 kilómetros por segundo contra Dimorphos, de 160 metros de ancho.
Ha sido el primer simulacro de una misión de defensa planetaria. El objetivo de la NASA era acercar ligeramente a Dimorfo a su compañero, acortando su período orbital. Y lo consiguieron: el impacto alteró la órbita de Dimorfo alrededor de Dídimo en 32 minutos. Un hito de la ciencia matemática, la astronomía y la ingeniería. Se demostraba así una estrategia que se podría seguir si algún día un asteroide amenaza la Tierra.
6. Hacia el arroz perenne
Este año, investigadores chinos han demostrado que un tipo de arroz perenne, que sobrevive y produce año tras año, puede ayudar a resolver esos problemas. Esta variedad, llamada arroz perenne 23 (PR23), se creó hace años cruzando arroz asiático comercial con otro silvestre perenne que crece en África. Ha llevado más de dos décadas mejorar su rendimiento y calidad.
Finalmente, en 2018, los investigadores de la Universidad de Yunnan y otras instituciones facilitaron esta nueva variedad a los agricultores de China, alistándolos en un experimento a gran escala para averiguar cuántas veces se puede cosechar el arroz y medir su rendimiento. El PR23 produjo la misma cantidad de grano que el arroz normal de siembra estacional, según informaron en noviembre en la revista Nature Sustainability. Este arroz perenne cada vez se cultiva más, aunque se sigue investigando cómo mejorarlo y sus posibles efectos sobre el medio ambiente.
7. El hito científico (y legal) fotovoltaico
Science se edita en EE.UU. y para ellos ha sido una verdadera revolución el vuelco en la política en renovables tras la marcha de Donald Trump de la Casa Blanca. Este verano, un senador clave abandonó repentinamente la oposición a abordar el clima desde las leyes. Y las disposiciones de la Ley de Reducción de la Inflación suponen el mayor paso que jamás haya dado Estados Unidos para frenar el calentamiento global.
La ley destina 369.000 millones de dólares durante 10 años a apoyar la electricidad procedente de fuentes renovables y la energía nuclear, a la vez que impulsa el paso generalizado hacia los vehículos eléctricos y la investigación para reducir las emisiones industriales. Esto consolida la vuelta al Acuerdo de París de EE.UU.
En España, entretanto, el autoconsumo fotovoltaico está teniendo un amanecer explosivo, tras la pandemia. La escalada de precios energéticos y el abaratamiento de las instalaciones han dado el empujón a una tendencia a poner placas que despertó tras los cambios introducidos en la ley y las subvenciones a nivel doméstico.
8. Peste negra, hasta en los genes
Otro hito de la ciencia es que 2022 se considere el año del principio del fin de la pandemia. Pero Science ha destacado un descubrimiento insólito: que otra epidemia, la de la peste, dejó una huella en nuestro genoma. Según publicaron en Nature, los supervivientes tenían muchas más probabilidades de ser portadores de variantes genéticas que potenciaban su respuesta inmunitaria frente a la bacteria de la peste: Yersinia pestis.
Esta variante protectora se encuentra aún hoy en el 45 % de los británicos, por ejemplo. Su persistencia sugiere que siguió siendo favorecida por la selección natural hasta hace poco, probablemente porque la peste fue endémica en Europa y Asia hasta el siglo XIX. Aunque esta protección tiene un precio: la misma variante también implica un mayor riesgo de desarrollar enfermedades autoinmunes.
9. El virus que está tras la esclerosis múltiple
En enero se confirmaban las sospechas que desde hacía tiempo manejaban médicos y virólogos. Un macroestudio demostró que el riesgo de esclerosis múltiple (EM) es 32 veces superior entre los infectados con el virus de Epstein-Barr, aunque contagiarse de este virus, el de la mononucleosis, no implica necesariamente desarrollar la EM.
El hallazgo puede conducir a nuevas formas de tratar o prevenir este misterioso trastorno, que provoca síntomas leves en algunos afectados, pero a otros les incapacita gradualmente para hablar o caminar.
10. La IA, cada vez más lista y creativa
Dos aplicaciones de inteligencia artificial (IA) han llegado a nuestros móviles y ordenadores este año. El sistema conversacional ChatGPT-3 y la artística DALL-E.
DALL-E (OpenAI) ha implementado una técnica de aprendizaje automático llamada difusión, donde las imágenes surgen del ruido guiadas por el contexto o las descripciones del texto. Una de sus aplicaciones ganó un concurso de bellas artes. Al mismo tiempo, Meta, Google y otras empresas han lanzado modelos de difusión capaces de crear vídeos.
Por otra parte, siguen las aplicaciones creativas de la IA en ciencia. Las herramientas que predicen la estructura 3D de las proteínas ya fueron uno de los hitos de la ciencia en 2021 y este año han avanzado. DeepMind (de la dueña también de Googe) ha logrado predecir la forma tridimensional de más de 200 millones de proteínas de la Tierra. Y con AlphaTenso diseña algoritmos más eficientes para gráficos por ordenador y simulaciones físicas.
11. Artemis, un pasito hacia la Luna y Marte
Hasta aquí, los hitos científicos recogidos por Science. Sumamos alguna noticia más que ha tenido un impacto importante en los últimos meses, como el inicio de la vuelta a la Luna. Realmente, la misión Artemis I ha sido sólo un primer y pequeño paso, pues no ha viajado una tripulación humana. Y seguramente el gran hito no llegará antes de 2024, con humanos de carne y hueso retornando a la Luna. Pero tras años de retraso, al menos se ha probado que el cohete SLS y la cápsula Orión funcionan.
Durante 42 días, recogió información para garantizar del éxito de futuras incursiones a nuestro satélite natural. Las misiones Artemis tienen como metas no sólo llevar a la primera astronauta y la primera persona racializada en pisar la Luna. También explorar su polo sur y la construcción de una base lunar que nos facilite la exploración de Marte y más allá, entre otras.
12. El verano en que despertamos al cambio climático
Lejos quedó la imagen del cambio climático retratado como un oso famélico sobre un iceberg. La emergencia se nota a nivel doméstico y este verano de 2022 ha sido el máximo exponente –junto a un inicio de invierno, también, anómalo–. Con +1,1 grados de más respecto a hace siglo y medio, han venido para quedarse las olas de calor recurrentes, las sequías agravadas y, seguramente, temporales más destructivos.
La región mediterránea es una de las más vulnerables a la subida de temperaturas y ya lo estamos notando. Pero no sólo: ciudades del norte de España, poco acostumbradas al calor –como la Europa más septentrional–, han visto cómo sus noches tórridas y tropicales se han disparado, con el consiguiente impacto en la salud.
13. Ganancia de energía con fusión nuclear
Ha sido uno de los hitos científicos mejor ‘vendidos’ de 2022. Estados Unidos desplegó todo su poderío comunicativo en la presentación de lo que, sin duda, en un paso clave hacia una revolución energética. La fusión nuclear promete electricidad casi de forma ilimitada con poco combustible y pocos residuos. Aunque hay muchas cautelas.
En el laboratorio público Lawrence Livermore de EE.UU. dicen haber usado menos energía para iniciar la reacción del experimento que la que genera la fusión una vez en marcha. Es la primera vez que se alcanza una ‘ganancia neta’ usando láser a modo de ‘encendedor’. Si bien, aún es necesaria mucha más energía para mantener la planta de producción y los láseres activos. Europa investiga otra tecnología de fusión.
La fusión nuclear no crea energía de la nada, pero promete cubrir las necesidades energéticas de una familia durante 80 años con apenas el hidrógeno contenido en un vaso de agua, y de forma teóricamente limpia. Por ahora está en pañales, es cara, requiere de unas instalaciones extraordinarias, extraer y convertir litio en tritio radiactivo y produce residuos (aunque de baja actividad).
+1. El fin de la pandemia, año -1
Más que un hito científico, es una constatación. Si había pocas dudas de que las vacunas anticovid han sido un éxito (con sus limitaciones), el fin de la covid cero en China ha terminado de probarlo. Despiden 2022 con los casos disparándose y algunos hospitales sobrecargados de neumonías, en una estampa más propia de hace dos años, que el resto del mundo ha dejado atrás.
El 90% de la población china mayor de 60 se puso una dosis de sus limitadas vacunas… y ya. Es decir, apenas el 70% continuó con el refuerzo, cuando había evidencias de que sus desarrollos vacunales eran bastante menos efectivos que los de ARNm utilizados en EE.UU. o Europa. Pero no había percepción de riesgo, toda vez que imperó la política de covid cero que tantas vidas salvó entre 2020 y 2022, a costa de restricciones y controles férreos que han terminado por ser insostenibles dos años después.
El coronavirus ya es endémico en el planeta Tierra. La pandemia no ha terminado oficialmente, pero todo es distinto. Globalmente, la proporción de muertes por covid nunca había sido tan baja desde el inicio de la crisis. Tras dos olas ómicron, la mayoría de países ha conseguido capear con sus peores efectos mediante las vacunas –con mejor o peor tino– y la inmunidad adquirida tras este tiempo (vía vacunal o natural) mantiene los contagios, aparentemente, bajo cierto control.
Con todo, siguen existiendo dos agujeros negros pendientes: la protección a la población más vulnerable (muy mayores o inmunodeprimidos) y la covid persistente (incluso en quien tuvo infección leve). Todavía se acusan excesos de mortalidad muy importantes en países como España, que personas expertas tienden a achacar a una combinación de muertes por covid, muertes por enfermedades diagnosticadas tarde (por la pandemia) y las olas de calor.
