En 2022, una guerra empezó como ciberguerra en Ucrania. Las monedas virtuales y los metaversos apagaron su brillo. Las grandes tecnológicas ven el fin de su era de dominio absoluto, pero la inteligencia artificial cierra un año excepcional.
La gran convulsión social de la pandemia siguió en 2022 generando cambios a varios niveles y el tecnológico no ha sido una excepción. El incremento de nuestras actividades cotidianas en internet ha provocado que delincuentes encuentren cada vez más ocasiones de actuar en entornos digitales, y las palabras phishing y ransomware se volvieron cotidianas.
Por otro lado, la mayor digitalización y luego la desinformación generada por la invasión de Ucrania han congregado un movimiento OSINT y de otros aficionados que florece en torno a la búsqueda de información online y formación en ciberseguridad. Mientras tanto, en España, la aplicación basada en el protocolo más respetuoso con la privacidad terminó sancionada por la Agencia de Protección de Datos.
La monstruosa cantidad de datos recolectados por las plataformas ya permite alimentar a las máquinas decentemente y la inteligencia artificial se hace popular. Tecnologías que imaginamos hace años como ciencia ficción sirven para explicar experimentos científicos, y la física cuántica abre las puertas a futuros posibles, aunque parezcan complicados de explicar. Y también tenemos un tecnólogo inquieto -por describirlo rápidamente- que ha comprado la red social más influyente en el panorama mediático, político y cultural, mostrándonos en unas pocas semanas cómo los problemas generados por comunidades humanas no pueden arreglarse con soluciones algorítmicas o autoritarias.
Aquí, un repaso rápido y no exhaustivo por estos y otros acontecimientos clave que hemos contado desde esta sección, para entrar al menos, preparados para lo que nos traiga 2023.
Ciberguerra y desinformación en Ucrania
Desde el principio de la invasión, Rusia intentó controlar también otro frente de batalla en Ucrania: el ciberespacio. La particular infraestructura de los ISPs en Ucrania es resiliente, pero Rusia logró redirigir el tráfico hacia servidores rusos en los territorios ocupados.
Varios ciberataques dirigidos a infraestructura crítica para Ucrania precedieron la invasión de los rusos. Aunque presagiaban lo peor, la palabra ciberguerra se quedó demasiado grande al lado de los tanques en el terreno.
Internet este año en Ucrania sí fue el medio donde millones de personas de todo el mundo se informaron al instante de lo que sucedía en relación con la invasión. Habíamos visto guerras lejanas por internet otras veces pero en esta los ucranianos transmitían desde el terreno sin mediadores lo que era una guerra en suelo europeo. La comunicación del conflicto bélico y el uso de redes sociales por parte del gobierno de Zelenski fueron sin duda una de las mejores armas de esta guerra. Miles de internautas en todo el mundo se han convertido en expertos de inteligencia de fuentes abiertas u OSINT han seguido día a día lo que ocurre, analizan imágenes de satélites y conversaciones de radio entre soldados rusos, y hacen mapas colaborativos para ayudar a los ucranianos.
El año en que la inteligencia artificial se hizo popular
La expresión del año ha acabado siendo inteligencia artificial, según la Fundeu. Este es el mismo año en que un ingeniero de Google, Blake Lemoine, creyó ver un fantasma en la máquina, y casi podemos entenderlo. La popularidad de ChatGPT ha puesto la guinda final a un año en el que la evolución continua de las inteligencias artificiales generativas nos han dejado con la boca abierta.
Lo que comenzó como un goteo de experiencias de quienes jugaban con programas que generaban contenidos como GPT3, Stable Diffusion o Midjourney se ha vuelto algo común y hasta popular con ChatGPT. Todos quieren contar su diálogo con el nuevo juguete de OpenAI y las redes se llenan de capturas de pantalla con poesías con temáticas imposibles, códigos corregidos con sus bugs explicados en segundos, resúmenes académicos en los que alguien descubre errores, y por eso también se sorprende. No deberíamos, porque estos modelos de lenguaje como ChatGPT están ahí para que provoquemos esos errores. Son experimentos abiertos para aprender de nosotros, aunque nuestros instintos sociales sean tan fuertes que no podamos dejar de ver algo más que un reflejo humano.
Los modelos de lenguaje generativos han sido la novedad pero la IA no ha dejado de avanzar en varios campos: visión artificial, automatización de flujos de trabajo, identificación de objetos o personas, conversión del lenguaje hablado en formato legible por una máquina, entre otros.
Energía inagotable con la fusión nuclear
A finales de año ha llegado un descubrimiento científico que puede, sí, cambiar el mundo con sus implicaciones tecnológicas: la generación de energía con la fusión nuclear hace posible tener energía limpia, barata e inagotable. Por primera vez hemos conseguido producir más energía que la que empleamos en el proceso de hacerla.
Las consecuencias de algo así van desde nuestra relación con el medio ambiente hasta el orden político y económico internacional. En Norteamérica ya han usado con éxito rayos láser para comprimir el combustible y calentarlo, algo que hacen así las estrellas. A lo largo del año que viene o el próximo tendremos resultados “espectaculares” a este lado del Atlántico, vaticina Eleonora Viezzer, física que trabaja con energías de fusión desde hace años.
Las grandes leyes europeas de internet echaron a andar
Una norma jurídica histórica y la que probablemente mayor expectación ha despertado finalmente ha entrado en vigor este año: la Ley de Servicios Digitales (DSA) y la Ley de Mercados Digitales (DMA). El paquete de leyes europeas que regulan a las plataformas y mercados en internet han dado a la Unión Europea el reconocimiento mundial de ser territorio pionero en protección de los derechos fundamentales de los usuarios de internet y poner límites al poder hasta entonces ilimitado de las grandes compañías tecnológicas.
Con los últimos vaivenes en la nave de Twitter, Meta en plena construcción de su metaverso, el crecimiento de plataformas alternativas, y un año en que muchas plataformas buscarán alimentar su inteligencia artificial con los datos que han recolectado, en 2023 tendremos novedades en torno a su aplicación.
El sueño de una internet cuántica
En junio un experimento en Delft probó algo más que el teletransporte de partículas cuánticas. Consiguió que esos cúbits transmitieran información a otros más allá de los más cercanos. Muchos titulares hablaron del sueño de una internet cuántica, aunque aún esté lejos.
En 2022 en el mundo unos 30.000 millones de financiación gubernamental se asignaron para desarrollar tecnologías cuánticas, consideradas estratégicas en la escala de la seguridad nacional y la macroeconomía. Lo son por las áreas en las que tendrá impacto: servicios financieros, logística, transporte, industria aeroespacial y automovilística, ciencia de los materiales, energía, agricultura, farmacéutica y ciberseguridad. En España varios programas desarrollan tecnologías cuánticas, coordinados con la UE. Este año contamos cómo funciona la red cuántica más grande de Europa, que se extiende sobre Madrid y será parte de la gran red cuántica europea en un futuro.
Deepfakes en tiempos de guerra
En 2022 apareció el primer deepfake usado para la desinformación en contexto de guerra: fue un vídeo de un Volodimir Zelenski anunciando la rendición de Ucrania. Que esto sucedería en algún momento del conflicto lo había pronosticado el equipo de gobierno del presidente ucraniano, lo que hizo que el primer deepfake de la guerra fuese desmontado en el mismo día. Luego hubo otros deepfakes, paródicos o reales, que intentaron engañar a cinco alcaldes europeos, el de Madrid incluido.
La combinación de inteligencia artificial con vídeo va alcanzando una sofisticación que hace que a veces sólo un experto pueda distinguir lo verdadero de lo manipulado, y en Newtral contamos cómo hacerlo. La tecnología ha evolucionado y este año hemos contado cómo distintos tipos de empresas ya venden estos servicios.
Las estafas se multiplican en entornos digitales
Este año todos los informes de expertos han visto subir el número de intentos de ciberataques, fraudes online y phishing. El tipo de ataque más común ha sido el ransomware, en el que el objetivo generalmente es robar datos. En España, más de 30 organizaciones en España de tipo público y privado habían sido ciberatacadas y extorsionadas en la primera mitad de año. Las instituciones públicas y sobre todo las relacionadas con la educación, la investigación y la salud fueron las que más ciberataques recibieron. Entre ellas, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que recibió un ciberataque de ransomware contra varios centros lo que ocasionó, además de una parálisis de las 149 entidades bajo su paraguas, robo de datos personales sensibles.
El Twitter de Elon Musk
En 2022 la red social más usada para la información política y en tiempo real, cambió de manos. Elon Musk compró finalmente Twitter por 44.000 millones de dólares, inaugurando una etapa con una serie de cambios. Despidió a la mitad de su plantilla, y muchos empleados renunciaron. Anunció cambios en la verificación que será para quienes paguen una suscripción. Muchos usuarios dejaron la red y se fueron hacia otras plataformas. Mastodon vio llegar a gran parte de ese éxodo: llegaron a ser unas 150.000 nuevas cuentas diarias cuando normalmente son 50.000.
A pesar de que Musk se ha llamado a sí mismo un “absolutista de la libertad de expresión”, sus acciones desde entonces han puesto constantemente eso en entredicho. En los primeros días, levantó las suspensiones sobre cuentas que habían violado las reglas, muchas de ellas grandes desinformadores sobre COVID-19, negacionistas del resultado de las elecciones en las que ganó Biden, y seguidores de QAnon. A su vez, suspendió a periodistas que criticaban estas acciones, lo que generó un gran debate sobre la libertad de expresión de este tipo de plataformas en manos privadas (luego levantó esas suspensiones). Estableció un sistema automatizado para gestionar los reportes, lo que derivó en campañas de abuso por parte de grupos de extrema derecha aprovechan esto para suspender a investigadores proderechos humanos. Los discursos de odio han aumentado drásticamente, según varios estudios.
Tras una encuesta en la que la mayoría de los usuarios votó a favor de que se fuera, Musk dice estar buscando a alguien que le sustituya en el puesto.
Criptomonedas que pierden brillo
NFTs, metaversos de realidad virtual o criptomonedas: varios proyectos con la tecnología blockchain en común no han contado con los números para justificar el entusiasmo con el que habían sido recibidos en 2021. Las promesas de la Web3 y los NFTs resultaron ser falsas: no eran descentralizados, ni inclusivos, ni pretendían cambiar paradigmas sino consolidar el poder en las mismas manos, blancas y masculinas.
En el año en que muchas empresas invirtieron en inteligencia artificial, la caída en los valores de Bitcoin y otras criptomonedas se extendió a lo largo del año, junto con noticias sobre fraudes. En las últimas semanas, el hundimiento de FTX, el tercer mercado de compraventa de criptomonedas más importante, y los cargos de estafa de su dueño, Sam Bankman-Fried, a quien se compara con Bernie Madoff, acaban de configurar un cierre de año desastroso para el mundo cripto.
Línea del horizonte de una ciudad, hecha con Midjourney | Promptart (Midjourney) 
