La aprobación por decreto ley de la reforma de las pensiones en Francia, que conllevará el retraso de la edad de jubilación de los 62 a los 64 años en 2030, ha provocado una gran contestación política y social en el país galo, con la presentación de dos mociones de censura fallidas y la generalización de los disturbios callejeros. Según datos de la agencia estadística europea, Eurostat, Francia gastó el 13% de su Producto Interior Bruto (PIB) en pensiones de jubilación en 2020 —el 15,9% en pensiones de todo tipo—, una proporción tan solo superada en Europa por Italia (14,1%) y Grecia (14,5%).
En el extremo opuesto, Irlanda (4%), Malta (5,5%) y Lituania (5,8%) registraron los niveles de gasto en pensiones más bajos de la Unión Europea, mientras que España (10,6%) realizó un desembolso ligeramente inferior a la media del club comunitario (10,9%).
No obstante, si tenemos en cuenta todos los gastos asociados al estado del bienestar, Francia se sitúa como el país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con mayor gasto social en relación a su PIB (31,6%), de acuerdo con los datos de esta entidad para 2022. Este desembolso fue 3,3 puntos porcentuales inferior al de 2020, siguiendo la tendencia de rápida reducción de la inversión social tras la normalización de la situación sanitaria.
Este gráfico forma parte de la serie #En1Gráfico. Usamos datos y visualización para sintetizar y explicar un tema de actualidad.
Fuentes
Gobierno de Francia
Asamblea Nacional de Francia
Eurostat
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)
