Las limitaciones de los vídeos virales de comida vista bajo un microscopio

Cada cierto tiempo circulan vídeos por las redes sociales en los que se ponen cortes de comida en un microscopio y se “revela la verdad” del contenido de los alimentos. El más reciente es una grabación del nutricionista Carlos Ríos en la que se hace un corte de una salchicha procesada y se observa desde un microscopio. Días atrás, se compartió en las redes un “experimento” similar con un Ferrero Rocher.

A raíz de estos videos, usuarios en redes suelen difundir estas imágenes junto a afirmaciones sobre la calidad nutricional o la seguridad alimentaria del elemento que ha sido analizado “bajo el microscopio”. Sin embargo, las especialistas advierten a Newtral.es que este no es un método válido que permita sacar ese tipo de conclusiones sobre un alimento. 

“Usar una lupa para ver la calidad nutricional de un producto, que es lo que realmente se está usando en estos vídeos, es como pesarte con un metro”, afirma a Newtral.es Gemma del Caño, farmacéutica especialista en calidad y seguridad alimentaria y divulgadora. “Con el supuesto microscopio ves muy de cerca el alimento, pero nada más, y confunde a la población”, añade. 

Por ejemplo, según Del Caño, “si vemos muy de cerca una fresa parece una mermelada, pero no sabemos qué tipo de azúcar es realmente, es decir, no sabemos si lo que vemos es correcto o no”. 

¿Mermelada?
No. Una fresa. pic.twitter.com/ILf4ybXrV3

— Gemma del Caño (@farmagemma) January 22, 2023

También critican este método desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan). “Esta metodología de análisis no tiene ningún fundamento ni rigor científico y por lo tanto no tiene validez a la hora de determinar ni la seguridad ni la calidad de los alimentos”, declara a Newtral.es M.ª Aranzazu López Franco, vocal de la Aesan. 

Según Del Caño, si se quiere conocer la calidad nutricional de un producto, no sirve con colocar el alimento bajo el microscopio o lupa, sino que “se tienen que hacer los análisis correspondientes”. 

“Se debe ver en un laboratorio la cantidad de azúcar, de grasa y proteínas y con eso podríamos ver los valores nutricionales verdaderamente”, añade la divulgadora. 

Observar comida bajo un microscopio o lupa como aparece en los vídeos no da información sobre su seguridad alimentaria

En las grabaciones virales en las que se ve comida bajo el microscopio también se pone en duda la seguridad del alimento. Por ejemplo, circuló un vídeo en el que se observaba un bombón de Ferrero Rocher en el que aparecían supuestos organismos. Sin embargo, como verificamos en Newtral.es, tampoco seguía un método adecuado. 

“Para analizar una muestra de alimento, hay que seguir unas pautas, un procedimiento determinado”, afirmó Hikmate Abriouel, catedrática de Microbiología por la Universidad de Jaén.  “El aire, las superficies y los utensilios tienen microorganismos. Se debe trabajar en un ambiente estéril y el material con el que manipulas el alimento también debe estarlo porque, de lo contrario, se puede dar un caso de contaminación cruzada”, explicó a Newtral.es. 

Sin embargo, estos vídeos no muestran un procedimiento como el que describe la microbióloga. Además, Del Caño reitera que para analizar la seguridad alimentaria de un producto no basta simplemente con observarlo con una lupa. 

“Se deben hacer análisis de laboratorio para ver si hay contaminación por salmonella, cuerpos extraños, E.coli o listeria, algo que no se puede ver ni con lupa ni con microscopio”, explica la farmacéutica. 

La Aesan recoge las alertas alimentarias de interés general

En realidad, para saber si un alimento tiene un problema de seguridad no se debe observar por un supuesto microscopio, sino que se puede consultar la página web de la Aesan, donde su Red de Alerta Alimentaria se encarga de recoger las posibles alertas que pueden afectar a productos vendidos en España. 

Según esta red, no ha habido en los últimos años ninguna alerta sobre unas salchichas, solo una posible alerta de listeria en un producto italiano en septiembre de 2022 que no llegó a España. Sobre los bombones de Ferrero Rocher, la alerta más reciente realizada por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) sobre un producto de Ferrero fue en diciembre de 2021, y se trató de la presencia de proteínas lácteas que no estaban contempladas en su etiquetado. 

Aun así, Del Caño destaca que hay que diferenciar entre calidad y seguridad alimentaria. “Un producto puede ser una castaña en cuanto a calidad nutricional (como unas salchichas) y que sea seguro, del mismo modo que una lechuga puede ser muy sana y que pudiera tener un problema microbiológico”, aclara. “Pero en ninguno de los dos casos se distingue con una lupa”, concluye.